Mujer/Comprometida/Sin Hijos/Gay
¿Cómo era tu vida amorosa/sentimental antes de marzo 2020?
Mi prometida y yo llevábamos 5 años viviendo juntas como novias y mamás de 3 perritas. Nos conocimos cuando me mudé a Panamá después de vivir en Estados Unidos por muchos años. Al llegar pensé que conocer otras mujeres y tener una relación en Panamá iba a ser difícil por la mentalidad “aún limitada” hacia la comunidad LGTBI, así que decidí abrir una cuenta de Tinder y ver como estaba la cosa. La primera persona con la que hice match fue a quien ahora es mí novia, la invité a comer desayuno chino para nuestra primera cita. 5 años después y una pandemia encima estamos comprometidas para casarnos.
"Con la pandemia y estando encerradas todo el día en casa, entendí que tenía que aprender a crear espacios en la casa para convertirla en un hogar"
¿Como fue tu vida social/amorosa/sentimental al arrancar la pandemia en el 2020?
Para resumir, mi experiencia en la pandemia es “I really grew up”. Por ser artista mi vida siempre ha sido de un lado para el otro. Entre ensayos y presentaciones me pasaba el día dando brincos por toda la ciudad y al final de la tarde visitaba a mis padres para luego llegar a casa y cenar con mí novia. Con la pandemia y estando encerradas todo el día en casa, entendí que tenía que aprender a crear espacios en la casa para convertirla en un hogar. Una de las primeras cosas que hice fue aprender recetas nuevas, ella es vegana y las opciones de restaurante veganos con delivery era escasas los primeros meses de cuarentena así que aprendí a cocinar lo que a ella le gusta. Sentía que al preparar y experimentar con recetas mientras ella trabajaba era una manera de darle amor, porque dar de comer es una acción y al alimentar al otro amamos.
"algo cambio en mi, realicé que ella no es solo mi amor, es mi familia, por lo que era hora de pedirle la mano para que nos casáramos"
¿Cuáles fueron los cambios cuando las medidas empezaron a abrirse?
Cuando los cambios empezaron a darse entendimos que nos sentimos muy cómodas estando en la casa. Uno de los proyectos en los que me enfoque fue conseguir un sofá para nuestra sala. Llevábamos años hablando de conseguir el sofá perfecto y siempre hubo razones para postergarlo. En la pandemia nos dimos cuenta que necesitábamos más espacios en los que pudiéramos compartir momentos juntas, así como también los nuestros por separado para nuestras creaciones y trabajo. Después de una búsqueda exhaustiva conseguí el sofá perfecto, como si lo hubieran hecho para nosotras. Ahora las noches después de comer las pasamos sentadas en el sofá disfrutando de silencios, risas y abrazos. Una de esas noches mientras nos mirábamos fijo a los ojos algo cambio en mi, realicé que ella no es solo mi amor, es mi familia, por lo que era hora de pedirle la mano para que nos casáramos. Empecé a planearlo desde ese día y no sé como hice para ocultárselo, porque cuando ella me mira yo siento que puede ver mí todo, pero lo logré.
"hoy planeo el ritual porque no quiero una boda pero sí un matrimonio con ella"
¿Durante la cuarentena algo cambio tu perspectiva sobre el amor/las relaciones que quisieras compartir?
El cambio más significativo fue darme cuenta que todos los retos que resolvimos juntas durante la pandemia nos convirtió en una familia. Nuestro amor creció, se fortaleció. Durante meses estuve planeando en secreto la pedida de mano. Lo primero fue conseguir un anillo que fuera perfecto para ella. Le pedí a amigos muy queridos ayuda y en la primera apertura de playas la sorprendí con un viaje a Taboga, no habíamos ido a la playa en años y se convirtió en el escenario perfecto para las 2. Estábamos caminando en la playa cuando me arrodillé y saqué el anillo, en el había pedido que engravaran “¿quieres comer desayuno chino por el resto de tu vida?”. Lo demás, todo, fue perfecto. Su respuesta, un desayuno chino vegano y kombuchas con etiquetas personalizadas (que nos hicieron nuestros amigos) y donde la etiqueta es una ilustración de las dos sentadas en el sofá con nuestras hijas, siendo la familia que somos. Me tomo darme cuenta que ella es mi familia y con la pandemia lo pude entender. Hoy planeamos una boda, aunque nunca pensé que fuera posible que yo fuera a participar de ese ritual, pero que con mí prometida lo hago porque no quiero una boda pero sí un matrimonio con ella.
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